¿Por que no me puedo sacar esa cancio?n de la cabeza?

 Hay canciones que pueden "infectarnos" y quedarse pegadas a nosotros. Hablemos de los conocidos como gusanos auditivos ??

¡Hola! En la Newsletter de hoy hablaremos de los curiosos gusanos auditivos, el nombre con el que se define el fenómeno por el que una canción nos “infecta” y no nos la podemos sacar de la cabeza. Del mismo modo, veremos cómo lograr que la melodía resuene sin parar en la mente y, como siempre, haremos un repaso de la actualidad en el mundo de la Psicología.

¡Empezamos!

— Natalia Menéndez, Pol Bertran

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Los gusanos auditivos:¿¿ cuando una canción nos “infecta” ??

Todos lo hemos vivido: escuchamos una canción y de pronto no podemos dejar de tenerla presente en nuestra mente. Si te sucede esta experiencia con frecuencia y deseas saber el trasfondo científico que la explica, sigue leyendo porque hoy te lo contaremos.

En primer lugar, es importante aclarar que este fenómeno no representa un proceso patológico, de hecho la inmensa mayoría de la gente lo experimenta de manera muy habitual. Los expertos han sentido por ello curiosidad, desarrollando investigaciones que buscan aclarar su origen. A raíz de estos estudios se ha bautizado a esta experiencia como earworms o gusanos auditivos. No te preocupes, no habita ningún gusano real en tu cerebro, es un nombre más bien metafórico que trata de expresar cómo una canción puede “infectarnos” y quedarse pegada a nosotros.

El efecto puede prolongarse durante varias horas y no está claro si tiene una función específica en nuestro sistema nervioso. Algunos autores han propuesto que este sea un mecanismo para mantener la mente activa en estados de aburrimiento, mientras que otros creen que es un intento de completar una melodía inconclusa.

En cualquier caso, los gusanos musicales pueden darnos problemas al interferir en actividades importantes, como por ejemplo el sueño. Si escuchamos música en las horas previas a dormir, aumenta el riesgo de que nuestra mente se quede enganchada en la repetición de la melodía, impidiendo conciliar bien el sueño. Lo mismo sucede con el estudio, algo que muchos no saben y es que escuchar música mientras se leen los apuntes es una práctica perjudicial aunque muy extendida.

Los gusanos auditivos se podrían definir como una pieza de música que se repite de forma involuntaria en repetidas ocasiones. Habitualmente, hablamos de fragmentos musicales de 15 a 30 segundos de duración, en los cuales normalmente se recoge un verso completo o el estribillo de una canción en particular. Las canciones con más papeletas para convertirse en gusanos musicales son aquellas de melodía simple y repetitiva. Las nanas y canciones infantiles son un buen ejemplo de este tipo de fragmentos musicales. En la Universidad de St Andrews decidieron ir más allá y revisar qué canciones podrían generar con más frecuencia esta especie de tic musical en la población. Lo que encontraron fue que, de las veinte canciones que más provocan el gusano musical, tres de ellas pertenecen al grupo Queen: We will rock you, We are the champions y Bohemian Rhapsody.

¿Qué hace que una canción se cuele en nuestra cabeza generando estos earworms? Pues bien, los estudios acerca de esta cuestión indican que los gusanos auditivos son recuerdos que se activan a partir de señales ambientales o experiencias internas. Es un fenómeno automático, es decir, no se origina nunca a voluntad. Es por ello que los gusanos auditivos pueden aparecer en situaciones muy diversas. Puede que si estamos divagando mentalmente demos con un recuerdo que nos conecta con esa canción. También es posible que oír a alguien pronunciar una palabra o percibir un olor cerca active la recuperación de un fragmento musical determinado.

Una vez que la recuperación de la canción ya se ha iniciado, pueden suceder dos escenarios: Puede que reaccionemos positivamente a esta experiencia, lo que favorecerá que el gusano auditivo se diluya de forma más rápida y espontánea. Sin embargo, cabe la posibilidad de que mostremos una reacción de rechazo, lo que conduce a intentar suprimir o bloquear el fragmento musical. Paradójicamente, esto llevará a entrar en una repetición en bucle. Así, cuando mayor sea el esfuerzo por sacar la melodía de la mente, más intensa se hará la repetición.

Cómo dejar de escuchar una canción en bucle en tu cabeza ?????

De acuerdo a lo que venimos comentando, una vez que tenemos una melodía enganchada en nuestra mente no es útil esforzarnos en eliminarla. Así, cuando los gusanos auditivos nos resultan un fastidio tendremos que apostar por medidas encaminadas a aceptar y revisar la experiencia.

Una primera opción reside en permanecer pasivos ante el recuerdo musical. Aceptar que se ha activado y tratar de seguir con nuestra vida sin buscar suprimirlo a toda costa. Otra estrategia que puede resultar interesante es la saciación. Esta consiste en reproducir la canción en bucle sin parar, con el objetivo de “cansarnos” de ella y lograr que el bucle se interrumpa.

También puede ayudar el emplear elementos que dividan nuestra atención. No buscamos eliminar ese fragmento, sino restarle protagonismo. Algo tan sencillo como puede ser masticar un chicle puede servir para tomar distancia de ese gusano musical y favorecer que se diluya más deprisa.

Escuchar otra melodía también puede ser una buena estrategia para romper el bucle del gusano musical. Procura escuchar canciones que no sean demasiado simples o repetitivas, ya que como comentamos más arriba estas son las más relacionadas con el fenómeno de los earworms.